Cómo organizar la cocina sin rastro de gluten con Proceli

Cómo organizar la cocina sin rastro de gluten

Siempre es importante tener presente que existe la posibilidad de que alimentos sin gluten puedan entrar en contacto y mezclarse en algún momento con esta proteína. Al suceder esto, los alimentos libres de gluten dejan de ser aptos para los celíacos. Este proceso, conocido como contaminación cruzada, puede producirse en las fábricas de alimentos, en los restaurantes y en el hogar, por eso es importante prestarle mucha atención para evitarla.

Afortunadamente no es necesario tener una cocina exclusiva para cocinar sin gluten, tan sólo hay que saber cómo organizarla. Así pues, es posible producir y manipular productos seguros sin gluten en un espacio no dedicado específicamente para ello, pero es necesario que existan normas y procedimientos para prevenir la contaminación cruzada. ¡Te dejamos con unas pautas que te serán de ayuda!

  1. Preparación y manipulación.

    Antes de la preparación o manipulación de los alimentos es importante lavarse bien las manos, la zona y los utensilios que se van a emplear para cocinar. Es importante lavar bien encimeras, mesas y utensilios como ollas, sartenes, cubiertos o platos para asegurar que no queden restos de alimentos que puedan contener gluten. También hay que prestar especial atención a pequeños electrodomésticos como las batidoras, las tostadoras y las sandwicheras, pues pueden quedar restos de gluten en sus astas y/o en su interior.

  2. Almacenaje.

    Lo ideal es establecer espacios separados para almacenar los ingredientes sin gluten de los que sí contienen gluten. Si no puedes almacenarlos en lugares distintos o tienes que guardarlos en lugares como la nevera o el congelador, puedes meterlos en bolsas o contenedores herméticos, separados de los alimentos que contienen gluten y etiquetarlos bien para que nadie se confunda. Además, te recomendamos que si los productos comparten espacio se guarden los alimentos sin gluten arriba y los que sí contienen abajo, para evitar que la proteína se propague por la cocina y por encima de ellos.

  3. Cocción y horneado.

    A la hora de cocinar se debe tener precaución con la manipulación de los alimentos y el uso de los utensilios de la cocina. La cocción de alimentos sin gluten se ha de efectuar en recipientes diferentes a los empleados para otros alimentos. Es recomendable preparar siempre las comidas libres de gluten en primer lugar y nunca se debe reutilizar el aceite y/o el agua de cocción donde se frieron y cocinaron alimentos con gluten anteriormente. Lo ideal sería disponer de utensilios y recipientes exclusivos para cocinar alimentos sin gluten, aunque si no es posible, una limpieza antes y después del uso de estos favorecerá la ausencia de contaminación cruzada. El horno y el microondas no son estrictamente de uso exclusivo, por eso, se debe limpiar siempre antes de usarlo.

  4. Limpieza.

    Pon especial atención a la hora de limpiar los utensilios antes y después de su uso para así evitar la contaminación cruzada. Utiliza papel de cocina desechable en lugar de trapos de tela.

 ¡Esperamos que estos trucos te ayuden a mejorar el orden en tu cocina!